Cuándo  salí de bañarme  ,entro mi mamá  Teresa a bañarse y lógico ice lo mio y fui a espiarla desde que se desnudo vi sus hermosos pechos y su gran mata de vellos  negros y largos, vi cómo  se lavaba su panocha  y su cupo mientras lo hacía decía un nombre en voz baja y cerraba los ojos. 

Sin duda alguna estaba fantaseando con ese hombre misterioso. 

Cuándo  salió tenía puesta una falda gris arriba de las rodillas  y sin calzón  y una blusa blanca de tirantes delgada  sin brasier  y nós dimos las buenas noches y se fue así cuarto y yo me quedé  en la sala pensando  una estrategia para acelerar el momento  de coger con ella pues al paso que íbamos era algo inevitable. 

Alas 12 AM fui así cuarto y para mi sorpresa no tenía ni la blusa ni su falda sólo un pequeño medio fondo cubría a medias su panochas y este lo tenía levantado  y con una apertura  total por adelanté  que dejaba ver su panocha  peluda.  Esta vez fue mucho más fácil y con sumó  cuidado toqué  su concha  peluda y sus pechos  y no pude más y tras 15 o 20 minutos tocándola eyacule en sus vellos  púbicos de su Concha peluda  y así la dejé y me fui a dormir cómo  si nada hubiese pasado. 

Por la mañana  se levantó  y se baño nuevamente y se vistió normal y fue a preparar  el desayuno  y por mi parte también  me bañe y charlamos  un poco, y de pronto  me pregunto  que opinaba de las señoras que cogían con otro hombre y aunque estos fueran sus propios  hijos y que pensaría si una de estas madres le confesara así hijo que estaba enamorada de él  y deseaba tener uno o dos hijos con desprecio hijo. 

Le contesté  que no veía ningún inconveniente  pues  si habían de ambos lado convencimiento  y se aceptaban tal y cual eran, pues no veía problema  además la mamá  era la que debería de pensarlo muy bien pues tenía que tener en cuenta que iba a tener un marido joven y este le iba a pedir coger a todas horas y en todas las posees  existentes  y que ella no iba a andar con así no me gusta o no quieria  coger y además la mamá  sabe perfectamente  la papa caliente que esta tomando  .mi mamá  se quedó  pensando  y me dijo que todo lo que había dicho  era verdad y que era una decisión  que se debía tomar con el pasó  de los días. 

El restó del día fue casi normal aunque hubo uno que otro rosé  de nuestros cuerpos y ese día cerramos temprano el negocio pues estaban lentas las  ventas y bueno nós fuimos a descansar  y se metió a bañar y cuándo  estaba desnuda  le toqué  la puerta  que me dejara entrar a orinar y no quería  pero al final me dejo entrar y ante mi y a escasos  centímetros  la tuve desnuda y le dije que tenía una panocha  bien rica, apretadita y bien peluda  cómo  ami me gustaba y sólo  sonrió y me dijo que era un loquito  y que nomas  podía ver pero no tocar pues era mi madre y era pecado. 

Salí del baño bien excitada y me llamó  y me pidió que le llevara la falda nueva de mezclilla  suave con botones  que estaba sobre la cama y que se le había olvidado. 

Se la llevé  y me pidió  que entrara al baño y lo hice y la volví  a ver desnuda  y me iba a salir y me dijo que me quedara y que me sentara para charlar un rato pues se sentía sola y me quedé  ahí mirando cómo  mi santa madre, esa Señora  tan decente y tan puritana estaba totalmente  desnuda frente así propio  hijo.

Desabotono  la falda y se la puso sin panty y le pregunte  cómo  le gustaba hacerlo con ropa o sin ropa y me contesto que para ella era casi igual desnuda o con ropa aunque con ropa era más excitante. 

Se vistió y me pregunto si yo ya había cogido y le contesté  que nunca lo había hecho y después  me pregunto  cómo  me gustaría que mi esposa se vistió para cuándo  lo hiciéramos por primera vez y le dije que cómo  estaba vestida  ella pues era muy excitante mientras le metía la verga í desabrochando botón por botón de su falda hasta dejarle uno sólo. Sonrió y me dijo que se veía que ya tenía experiencia  .sonroje y le dije que y que nunca lo había hecho y volvió a sonreír y dijo ahí lo veremos pronto. 

Cenamos y se fue así cuarto a ver televisión  y yo me salí a fumar un cigarro y me dije que era el momento  de declararle mi amor, pues estaba muy decidida y debía aprovechar ese momento. 

Entre ala casa y me dirijo así cuarto y para mi sorpresa  estaba con la mitad de los botones  desabrochados y le vi su entrepierna  y le dije que deseaba hablar con ella y si podía y sonrío y me dijo que para mi  tenía todo el tiempo del mundo