Comí el otro día en un restaurante y los lavabos entró una mujer con proposición

Solo busco negros con vergas enormes. El seguridad de la disco me cogió brutal en un cuartucho y me reventó el culo.

Tengo casi 40 años y mi fantasía más intensa es que una pareja me domine, me use y me dé por el culo. Soy tímido, pero el morbo crece.

Salimos los tres de copas, la tensión explotó y terminé en un trío con mi esposa y mi cuñada. Fue una noche brutal e inolvidable.

Para cumplir su fantasía, la llevé a un hotel. Estaba tan caliente que llamó a su amiga por video y le mostró cómo me la cogía. Brutal.

Encontré mi perdición en un viaje de trabajo y me folló siete veces en la habitación del hotel. Mi cuerpo es un mapa de moretones y mi culpa pesa, pero el hambre es más fuerte.

Mi novio y yo probamos con una pareja. La doble penetración fue increíble, una sensación brutal y nueva. Pero aún así, no puedo dejar de compararla con el primer desconocido.

Para salvar mi relación, acepté un trío con un hombre. Él me despertó con su sexo brutal, dándome orgasmos que nunca tuve. Ahora mi pareja ya no me satisface.

Mis amigos me metieron dos vergas por el culo. Me hicieron gritar que soy su puta y me llenaron de leche. Fue increíble.

Cogiéndome a Alex, invitó a su amigo Hugo. Me forzaron entre los dos, llenándome los dos hoyos. Me encantó y lo hemos repetido.